
Willem Boel: MEMO, el poder del residuo en la Galería Hilario Galguera
La exposición “MEMO” explora quince años de investigación pictórica donde el tiempo, el azar y lo no-intencionado se convierten en protagonistas.
Cuerno Nueva York
En el marco de GAMA Week, la Galería Hilario Galguera inaugura MEMO, una exposición del artista belga Willem Boel (1983), que reúne más de quince años de exploración pictórica y que permanecerá abierta del 5 de septiembre al 24 de octubre de 2025. Conocido también como Memo —apodo que adquirió durante una estancia en México— el artista propone un lenguaje donde la pintura no se concibe como una imagen acabada, sino como un proceso en constante transformación.
El eje curatorial de la muestra gira en torno a la noción de residuo, entendido no como desecho, sino como un excedente estético y conceptual que emerge de manera autónoma. En las piezas de Boel, el gesto pictórico no busca un resultado final, sino que funciona como catalizador para que fuerzas externas como la oxidación, el clima o la propia reactividad de los materiales sean parte activa en la configuración de la obra.

En series como De Nieuwe Molens o Reward Paintings, el tiempo y lo aleatorio definen el carácter de cada pieza a través de capas acumuladas o rotaciones continuas. En otras, como Planetas o Pare Feu, la materia toma un papel protagónico: papeles que se oxidan lentamente o pinturas que desafían la gravedad al solidificarse en el aire. La práctica de Boel se aproxima así a las corrientes del process art, donde la huella del tiempo y el accidente adquieren una carga poética y conceptual.
La serie homónima MEMO se erige como núcleo de la exposición. Aquí, Boel sustituye el soporte de madera por rejillas metálicas, trabajando solo una de sus caras con gestos repetitivos y contenidos. El reverso, no intervenido de manera consciente, revela el verdadero “residuo”: superficies autónomas y no previstas que adquieren vida propia como topografías pictóricas independientes.


De esta manera, la exposición plantea una revisión crítica de la pintura contemporánea. Lo que tradicionalmente se consideraría accidental o descartable, en el universo de Boel se transforma en verdad estética. La pintura no es un dispositivo retiniano ni una forma cerrada, sino un campo expandido de operaciones materiales y conceptuales. En MEMO, la obra no se produce, se encuentra; y lo residual deja de ser un resto para convertirse en el núcleo mismo de lo poético.
Con esta muestra, la Galería Hilario Galguera reafirma su papel como espacio clave para el arte contemporáneo en México, ofreciendo una plataforma donde las prácticas más experimentales y críticas encuentran resonancia. MEMO es una invitación a repensar la autoría, el tiempo y la belleza de lo no-intencionado.
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