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Dolores Heredia

“La creatividad es un estado de gracia y, como tal, no es permanente.”

Muchas veces, el cuestionarnos conceptos como ¿quiénes somos?, ¿para dónde vamos?, ¿qué queremos ser?, puede llevarnos a un grado de conciencia más profundo, en el cual podemos llegar a retarnos como personas y, de esta forma, seguir creciendo y evolucionando. La actriz Dolores Heredia nos lleva a un paseo por distintas etapas de su vida, en la cual el cuestionamiento es el que la ha guiado para ser lo que es hoy en día

“Creo que uno no es uno todo el tiempo. Vas siendo muchas personas o perfeccionando esa que imaginaste ser. Pero perfección ni siquiera es la palabra correcta, sino cómo vas depurando. Soy alguien que está constantemente en búsqueda de encontrar el punto donde fuera como una palmera, ¿no? Pasan mal algunas cosas y esta solo se mueve, nunca se quiebra. Soy una persona que está en búsqueda de eso, de tranquilidad, serenidad, de querer mejor y más mi trabajo, a lo que me dedico, y eso trato de compartirlo. A lo mejor es un momento en el que también me gustaría compartir lo que ha sido mi experiencia, mi caminito por esta vida”.

En una profesión como la actuación, en la que el cambio es constante y el criterio del artista es un elemento fundamental y de mucho valor, la evolución en la trayectoria de Dolores la ha llevado a participar en producciones de alto valor, como ‘Sense8’, ‘Rudo y Cursi’, ‘Señorita89’ o ‘Pedro Páramo’, entre muchas otras.

“Algo de lo que me siento probablemente más orgullosa, o lo que hasta este momento me da más serenidad y tranquilidad, es que, desde mis inicios empecé a descubrir que yo quería hacer cosas que realmente me importaran. Si después la película, la obra de teatro o la telenovela, que hice muy pocas, no es interesante para el público o no tiene éxito, eso ya es secundario. Entonces desde muy pronto comencé a elegir qué quería hacer, qué historia me tocaba, qué trama me cuestionaba, qué historia me sembraba, para decidir estar en algún proyecto. Y han sido desde comedias, desde las cosas más ligeras, hasta mucho más intensas. Eso ha definido muchísimo mi carrera”.

Guiada por su instinto, Heredia se ha vuelto de las pocas actrices que al momento de elegir un proyecto, lo hace pensando en si será algo que le sea gratificante.

“Me fui dando cuenta de que a mí no me interesa tanto hacer mucho, sino que sea mejor desde mi punto de vista. Cuáles son los proyectos en los que de verdad uno puede decir: ‘Estoy creando, me dejan trabajar, tengo las herramientas al alcance de lo que a mí me permite crear’. Si es solamente para ponerse y explorar la actuación, también es válido, aunque yo me siento muy lejos de eso”.

Una larga trayectoria en todos los sentidos es un proceso de evolución, en el cual se atraviesa por momentos buenos y algunos un poco más desafiantes. Tal y como puede ser el caso del rol que toma ser mujer dentro de la industria.

“Ha cambiado muchísimo desde que inicié. Estoy cumpliendo casi 40 años de carrera y de pronto dices: ‘Madre mía, las cosas se hacen de diferente manera’. Pero creo que nosotros, los humanos que hacemos parte de los proyectos, los que estamos en este medio, hemos evolucionado. Ya no somos los mismos de hace 40 años que nada más nos vemos diferentes, tenemos distintas posiciones y entablamos una conversación que hace 20 años era impensable en temas de equidad, de género, sobre dónde y cómo nos encontramos. Pienso que las preguntas están siendo bien pertinentes ahorita y hemos profundizado en eso, lo cual nos ha transformado. Han cambiado también las formas de filmar, de colocarte en un set. Y digo esto de una manera muy optimista, positiva. Creo que sí ha cambiado para bien, trabajamos de una forma diferente, hacemos historias desde otros puntos de vista, estamos tocando mucho más y llegando a ser más horizontales. En ese sentido, somos más incluyentes, y aunque es una palabra que no me encanta, es eso, donde todos estamos abriéndonos para mostrar la diversidad humana en todos los sentidos”.

La toma de decisiones en torno a qué producciones o roles se van a desarrollar, se vuelve de vital importancia para actrices y actores.

“Ahorita acabo de terminar una ópera prima, pero una ópera primísima. Realmente el director, el productor, todo el equipo, estaba integrado por gente muy joven. Incluso el lenguaje utilizado era distinto. Entonces, en alguna escena pensaba: ‘Esto no se dice así. Ah, no, pero nosotros nos entendemos’. Y me di cuenta de que era yo quien tenía que adaptarme a una nueva forma de hacer. Era una historia donde dije: ‘Mira, esto no se ha contado de esta manera, le hablaremos a una franja de la sociedad casi olvidada, que son los adolescentes, una película chiquitita, tres personajes, una historia linda…’. Y pensé: ‘Sí, la hago’. Puede ser desde eso, donde no es que vaya a interpretar el personaje de mi vida, aunque uno nunca sabe, pero la historia, el conjunto de elementos, me hizo decidir por ello. Y también, no sé, podría ser incluso una comedia, es donde el corazoncito hace pum, pum…”.

Claro que la preparación para un personaje varía dependiendo del actor o la actriz, desde su construcción hasta la improvisación. Estos son algunos elementos que a Dolores parecen más importantes al momento de aceptar algún rol.

“He pasado por varias escuelas, experimenté muchísimas formas de abordar personajes y también a lo largo de la vida vas depurando y encontrando una fórmula propia. Sin embargo, muchas veces ese método no se aplica en todos los casos. Hay veces que ni siquiera tengo que regresar al guion, lo leo una vez, lo absorbo y me quedo sin volver a trabajar en él. No construyo un personaje de ahora, que se viste o camina de tal manera, sino que lo voy bordando alrededor de una idea. Voy juntando elementos, como una pieza de música, un cuadro que me inspire, un color, una luz e incluso personas que no conoces. Una conversación con alguien puede llevarte a construir. Pero también siguen existiendo otros personajes que los lees y piensas: ‘No, se visten así, hablan así, comen así, duermen así…’”.

Dolores toma el espacio de PERCHA MAGAZINE para compartirnos un poco sobre los proyectos que se aproximan y el cómo ha sido la evolución de estos.

“Vienen dos proyectos. Uno es la segunda temporada de una serie que quiero mucho, que fue un proceso de trabajo fantástico. Y también viene un tiempo para mí, que es lo más importante, y es que con tantos años de trabajo he llegado a la conclusión de que quiero vivir absolutamente más cerca de la naturaleza, desarrollando otras pasiones que tengo, que me mantienen de pie. Dedicarle más tiempo a la familia, a mis cosas, a leer todo lo que no he leído hasta ahorita, a hacerlo sin correr… Tengo pilas y pilas de cosas pendientes… Eso es muy valioso en este momento de mi vida”.

Para PERCHA MAGAZINE, la creatividad se ha vuelto la base de todo lo que hemos construido en este medio, uno para expresarse, pero también para transmitir y permitirse experimentar. A través de los años, ¿qué ha sido para Dolores la creatividad?

“Es un estado de gracia y, como tal, no es permanente. Pensándolo así, como un estado de gracia, tampoco llega como un acto de gracia. El estado de gracia hay que buscarlo, alimentarlo. Hay que generarlo alrededor de uno para que se acerquen, cuidar tu energía para que puedan llegar otras energías diferentes. Y que se vuelva ¡pum!, la chispa. Y eso no es nada… no es una cosa seria. Es seria en el sentido de que te entregas con totalidad a ello, pero es muy divertido buscar eso. Te pone de una manera muy diferente. Yo pienso que es eso”.

Transcripción y Estilo por Caro Camarena

Corrección por Rodrigo Chávez López

Fotografía Noel Higareda @noelhigareda
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