
DIANA BOVIO
Diana Bovio y el inicio de una nueva etapa: “Me siento como que crucé una meta”
En un momento de plenitud profesional, Diana Bovio se encuentra ante un punto de inflexión. Con una carrera en constante evolución, la actriz mexicana habla con Percha Magazine sobre su participación en Mentiras, el musical llevado a la pantalla, su proceso creativo y la intuición como brújula para tomar decisiones.
“Me siento muy satisfecha en este momento, como muy plena”, dice. “Le decía a una amiga: me siento como que crucé una meta. Y ahorita tengo tiempo para respirar, detenerme, ver hacia atrás y ver todo lo que he logrado”.
Después de consolidarse en proyectos como Mirreyes Contra Godínez y El Niñero, Bovio explora nuevos caminos. Uno de ellos es Mentiras, una producción que revela una faceta poco conocida de la actriz: su formación en teatro musical. “Creo que es el proyecto que más me emociona ahorita. Es un personaje que muestra mi lado musical, que mucha gente no conoce”, comparte.
Sobre el proceso para llegar a Mentiras, recuerda con emoción: “Fue un casting gigante. Yo estaba grabando la primera temporada de El Niñero, grabé mi canción, mandé el video con toda la ilusión del mundo… Pensando: si es para mí, es para mí”.
Dulce, su personaje, le llegó como un regalo. Y su preparación, aunque demandante, fue profundamente personal. “Fue trabajar muy específico y muy duro con Erika Dipp, que es la mejor maestra de canto que hay en México. Y encontrar a Dulce en mí, identificarme con ella”, explica.
La psicología, cuenta Diana, es clave en su proceso actoral. “Soy muy fan del psicoanálisis. Para mí es muy importante entender los traumas del personaje, sus inseguridades. Ahí es fácil encontrar puntos de encuentro entre Diana y el personaje”. Y añade: “Es un proceso de adentro hacia afuera. Primero la psique, luego cómo reacciona el cuerpo, y luego cómo se ve”.
En cuanto a lo que busca hoy en un papel, es clara: “Que sea distinto a lo que he hecho. Que no caiga en clichés o estereotipos. Me gusta interpretar a mujeres complejas. Intento que sean textos más auténticos y adecuados a nuestra época, en la que ya nos representamos de otra manera”.
Su crecimiento profesional ha estado acompañado de un profundo trabajo interior. “He aprendido a confiar en mi intuición. Antes no la tenía tan consciente. Pero ahora sé que mi cuerpo me dice cuando algo no está bien. Esa voz es una gran brújula para tomar decisiones”.
Uno de los mayores retos de su carrera fue mudarse de Monterrey a Ciudad de México. “Salir de esa burbuja color de rosa fue muy complicado. Fue doloroso, pero algo me decía dentro de mí que ese era el camino. Yo sabía que lo iba a lograr”.
Hoy, ese sueño se materializa en sets donde comparte escena con figuras que admiraba. “Me encanta estar en el set. Me siento como una niña de ocho años jugando. Me sigo sorprendiendo. Volteo y digo: ¿en qué momento llegué aquí?”.
Antes de despedirse, envía un mensaje a quienes están comenzando en el medio: “Que no desistan. Que confíen. Que tomen riesgos en sus castings, que busquen siempre algo muy específico, muy suyo, que puedan regalarle a ese personaje”.
Y cierra con una invitación: “A todos mis amigos de Percha, no se pierdan Mentiras. Les mando besos. Espero que esta Dulce les guste, les emocione y los haga reír”.
Fotografía Alberto Hidalgo @alberto.hidalgo
Styling Greta Forte @gretafortestudio
MUA Leonel Urdaneta @leonelmakeup
Hair Erick Moreno @erickmoreno