Ilse Salas

“Reflexiones, rebeldía y liberación en la pantalla”
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Ilse Salas recibe el 2025 con una mezcla de calma y claridad. “Yo suelo hacer decretos de Año Nuevo,” confiesa. “Escribo en un papel cosas que quiero que sucedan: tener un trabajo estimulante, estar saludable, cuidar a mi familia. No soy ambiciosa, pero elijo muy bien en qué quiero invertir mi tiempo.” Para ella, este año no es la excepción. Su meta sigue siendo la misma: trabajar en lo que ama, mantener el equilibrio físico y mental, y pasar tiempo en casa. “Aunque muchos no lo crean, soy muy hogareña”, asegura con una sonrisa.

Este enero llega con una de las sorpresas más emocionantes: el estreno de La Liberación, una serie que Ilse describe como un proyecto único y profundamente personal. La idea surgió durante el rodaje de Las niñas bien, en conversaciones con Alejandra Márquez Abella, Cassandra Ciangherotti y Johanna Murillo, mientras el movimiento #MeToo comenzaba a sacudir al mundo. “Hablábamos del feminismo y de cómo el movimiento era necesario, pero también de lo complicado que era abordar ciertos temas, como el abuso de poder o cómo algunas mujeres usaban la victimización para obtener algo. Siempre con mucho humor, esas ideas comenzaron a tomar forma hasta convertirse en lo que es hoy.”
La serie, explica Ilse, no solo conecta con el presente, sino que también explora las raíces del sistema patriarcal en el medievo. “Alejandra estaba leyendo Calibán y la bruja de Silvia Federici, y fue ahí donde empezamos a hilar este mundo que conecta el pasado con el presente. Es una narrativa muy loca, muy distinta a todo lo que hemos visto. Es onírica, desquiciada, no lineal. Me encantaría que la gente abrace esta forma de contar historias.”
Más allá de su formato innovador, La Liberación aborda temas profundamente políticos, como el feminismo, pero sin el peso de la solemnidad. “El feminismo está lleno de seriedad y parece que, como feministas, debemos ser intachables. Pero no es así: somos humanas, cometemos errores, cambiamos de opinión. Con humor, podemos desmantelar esa solemnidad y hacer que las conversaciones sean más accesibles.”
Ilse reflexiona sobre el impacto que tuvo trabajar nuevamente con Alejandra Márquez Abella. La relación entre directora y actriz, asegura, se ha fortalecido con los años. “Nos conocimos antes de Las niñas bien, pero fue ahí donde realmente conectamos. Ahora, después de tanto tiempo, podemos comunicarnos casi sin palabras. Alejandra sabe hasta dónde puedo llegar, cómo entiendo las cosas, y yo entiendo su lenguaje.”
Uno de los mayores retos para Ilse en La Liberación fue interpretar a dos hermanas gemelas. “Nunca había hecho algo así, pero por alguna razón tenía muy claros a los personajes desde el inicio. Lo curioso es que lo hicimos a la antigüita, con métodos clásicos más que con tecnología moderna. Fue muy divertido y técnico a la vez.”
Para ella, la esencia de la serie es profundamente irreverente. “Es una serie políticamente incorrecta que puede levantar mucho polvo, y espero que así sea. Aborda un tema importantísimo: el sistema patriarcal. Este sistema no solo oprime a las mujeres, también a los hombres que no cumplen con los estereotipos de masculinidad. Necesitamos cuestionarlo y, eventualmente, derribarlo. Creo que le conviene a todas las personas sensibles que este sistema desaparezca.”
Ilse admite que trabajar en una serie con un tema tan intenso despertó emociones encontradas. “Traté de ser una joyful feminist, como dice Agnès Varda, pero había días en los que estaba llena de ira. Es difícil no sentirse así cuando te enfrentas a las desigualdades diarias. Hace poco, mis hijos me preguntaron por qué existe un vagón exclusivo para mujeres en el metro, y explicarles eso me hizo reflexionar mucho. No es normal que necesitemos esas medidas, pero aquí estamos.”
El elenco de La Liberación fue cuidadosamente seleccionado por Ilse y el equipo de producción, y para ella, trabajar con algunos de los mejores actores y actrices de México fue un privilegio. “Todos dijeron que sí y fue increíble la disposición de cada uno. Este proyecto me dejó muy claro que las ideas tienen un valor enorme y que hay que reconocer el esfuerzo colectivo detrás de cada producción.”
Con cada proyecto, Ilse Salas reafirma su autenticidad y su compromiso con narrativas que desafían las convenciones. “No se trata de sobrevivir, se trata de vivir,” reflexiona. La Liberación no es solo una serie, es un recordatorio de que siempre hay espacio para la reflexión, el humor y el cambio.

Fotografía Juan Retallack @ilretallack 

Styling Freddy Alonso @_freddyalonso

MUAH Alberto Pérez @aifar